¿Cómo apuntarse a un Master puede apoyar los cambios en tu vida? Desde mi enfermedad, hasta mi felicidad cada día.
Virginia Pérez Rejas:
Alumna de la décima edición del Máster de Coaching en Madrid.
Tener una enfermedad rara precipitó que abandonara mi trabajo vocacional de enfermera.
Entonces, te das cuenta de que hay algo que te falta. Sientes la necesidad de cambiar, de encontrarte contigo mismo, entonces descubres que ha llegado el momento de ponerte en acción y buscar algo que de verdad te llene, te aporte ese “algo” que sabes, te falta para ser feliz.
Así fue como empecé a buscar, y buscando y buscando, os encontré, encontré este Master en Coaching, master que nunca imaginaba que sería tan revelador.
El primer día dije a mis compañeros: “las personas que estamos aquí, no vamos a ser las mismas cuando salgamos en Diciembre”. Esto lo dije un día de Enero de 2016 y la verdad que todos, estamos viendo nuestros avances y nuestro cambio a lo largo del año.
Este master, me abrió los ojos en su momento, abrió la “Caja de Pandora”, me hizo ver la realidad que no podía ver por no tener las herramientas necesarias para ello.
Eso supuso el principio del fin, mucho tiempo cargando una mochila que no había forma de dejarla aparcada ni un sólo segundo.
Si de algo quiero aprovechar este artículo es, para dar las gracias a todas y cada una de las personas que están compartiendo conmigo este camino.
Gracias a estas personas, he vuelto a ver la vida como en realidad es, no con los filtros que yo tenía puestos, hemos visto las luces y las sombras de la vida, de nuestra vida.
La felicidad existe, sólo hay que encontrar el camino adecuado y de la mano de la persona adecuada. El coach te proporciona las dos cosas: la visión de ti como persona que quieres ser y el camino que deseas conseguir.
Ser feliz, sí se pude. Afrontar las cosas con ilusión, alegría, saber que eres tú y no lo que creías ser.
La vida te enseña a afrontar dificultades, cuando la enfermedad está presente en tu vida, la vida es diferente en todos los aspectos, es una lucha continua, una superación diaria, un reto. Hoy es el día que puedo decir, que he vuelto a sonreír, he vuelto a ser feliz y todo gracias a un Master que en su día su única misión, para mí, era aprender un poco más y gracias a ponerme en marcha y compartir con mi grupo, me ha devuelto las ganas y he vuelto a Sonreír. GRACIAS.